Los termostatos estilo bombilla y capilar usan líquido expansivo para abrir o cerrar contactos en respuesta a cambios de temperatura. No importa qué estilo o modelo elija, todos los termostatos capilares funcionan con la misma física. Un fluido se encapsula en un tubo de metal (bulbo y capilar) y cuando la temperatura cambia, el fluido se expande o contrae. Este cambio de fluido mueve la cabeza, lo que desencadena un interruptor de acción rápida, ya sea abriendo o cerrando el circuito.